Prensa extranjera vuelve a poner su ojo crítico sobre Chile

19 Abril 2007
Artículo en "Forbes" aseguró que la insatisfacción en nuestro país constituía un riesgo para la estabilidad local. Así encabeza Economía y Negocios de El Mercurio
un artículo que
este jueves 19 de abril se refiere
a la imagen intenrnacional del país.

Chile volvió a tener ayer una aparición poco favorable en la prensa económica internacional, tras la publicación en la prestigiosa revista "Forbes" de un artículo sobre el riesgo que representa para la estabilidad local la insatisfacción en la sociedad civil.
Citando un artículo de la consultora Oxford Analytica, "Forbes" asegura que las protestas callejeras comenzarán a aumentar, a menos que los partidos respondan a las demandas de los ciudadanos, y que la elite política "suelte" el poder.

Esta aparición desmejorada de Chile se suma a otras menciones surgidas en los últimos días en medios como Bloomberg, "The Financial Times" y "The New York Times", que son consultados diariamente por millones de analistas e inversionistas.

El tema favorito de la prensa internacional ha sido el Transantiago y los problemas que éste ha originado, incluso, llegando a sugerir posibles efectos comerciales. "Nuevo sistema de transporte en Chile perjudica la economía", rezaba el titular de uno de los temas de análisis de Bloomberg la semana pasada.

"The New York Times" fue más duro: "En vez de simbolizar la prosperidad y progreso de Chile, el nuevo plan Transantiago ha venido a representar la ineptitud oficial y ha hecho una burla de la promesa de la señora Bachelet". Pero los analistas de Wall Street (que diariamente analizan a Chile) aseguran que estas apariciones en la prensa no son suficientes para desincentivar las inversiones extranjeras.

"Yo lo mido según los llamados que recibo de los inversionistas preocupados, y no he recibido ninguno", asegura el analista de Merrill Lynch Pablo Goldberg, quien asegura que se necesitarían problemas mucho mayores para causar efectos, dada la estabilidad fiscal del país.

Esta visión la comparte Alberto Ramos, de Goldman Sachs, quien asegura que la pérdida de firmeza de las instituciones no alcanza a disuadir a los inversionistas, "aunque sería mejor que no estuviera sucediendo". Así también, Bertrand Delgado, de Idea Global, dice que "el país puede aguantar este tipo de eventos", por lo que mientras no se comprometa la estructura, seguirá siendo un tema doméstico.

En un análisis más profundo, el cientista político del Cato Institute, Ian Vásquez, asegura que lo que está en juego a ojos internacionales es la popularidad de la Presidenta para gobernar, no la estabilidad económica.
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