Seis instituciones educativas ubicadas en las regiones de O’Higgins, Biobío, La Araucanía, y Los Lagos han recibido un impulso vital hacia la revitalización de sus comunidades educativas.

Más de 300 estudiantes de escuelas rurales y un jardín infantil en áreas afectadas por incendios forestales y temporales recientes se beneficiarán de un año de conectividad de Internet Satelital gratuita, gracias a una colaboración entre Desafío Levantemos Chile y Hughes.

La iniciativa abarca el Jardín Infantil Ayenhue en la región de O’Higgins; las escuelas Colico Alto y Colico Bajo en la comuna de Santa Juana, región del Biobío; la Escuela Nueva Milla Rayen en la comuna de Galvarino de la Provincia de Cautín, en La Araucanía; la Escuela Ilque en Puerto Montt; y la Escuela Manuela Cárdena Barria en Isla Quehui en Castro, región de Los Lagos.

En el contexto de la actual crisis educativa en el país, donde más de 1 millón 300 mil estudiantes enfrentan niveles significativos de inasistencia, esta colaboración cobra una relevancia crucial. Datos recientes de Acción Educar revelan una disminución constante en la asistencia escolar durante el primer semestre de 2023, con una caída más pronunciada entre mayo y junio. Por ello, la conectividad brindada por este proyecto conjunto se presenta como una solución esencial para abordar este desafío educativo.

Raúl Peñailillo, director de ventas y operaciones de Hughes Chile, expresó su orgullo por contribuir a esta noble causa: "El Internet satelital es una solución eficiente y efectiva para llevar conectividad a lugares afectados por emergencias o desastres naturales, facilitando labores de rescate y reconstrucción, además de mejorar la calidad de vida de las personas".

El director ejecutivo de Desafío Levantemos Chile, Ignacio Serrano, subrayó la importancia de esta colaboración y afirmó que "hoy más que nunca, la conectividad digital juega un rol fundamental para acortar brechas y construir un Chile con mejores oportunidades".

Esta iniciativa representa un paso significativo hacia la igualdad de oportunidades educativas para todos los estudiantes, independientemente de su ubicación geográfica o circunstancias personales. Al utilizar la conectividad como herramienta, se anticipa un desarrollo educativo significativo en las zonas vulnerables, marcando un hito en la construcción de un futuro más equitativo y prometedor para la juventud chilena.