Enseñar sobre la Propiedad Intelectual Teaching Intellectual Property

22 Mayo 2012

El desarrollo de videojuegos se ha convertido en un mercado cada vez más atractivo para los jóvenes emprendedores, en especial debido a la creciente penetración de aplicaciones de teléfonos inteligentes en todo el mundo. De hecho, en Chile hay más de 20 compañías dedicadas a producir videojuegos. Pero el crecimiento de esta industria en Chile, tal como el de otras basadas en la innovación, depende de una mejor protección de la propiedad intelectual.

La educación de los chilenos sobre la importancia de la propiedad intelectual comienza en el colegio. Por esta razón, la Embajada de Estados Unidos, en alianza con el capítulo chileno de Licensing Executives Society (LES), recientemente auspició talleres de videojuegos para estudiantes de entre 12 y 14 años de edad. LES es un organismo sin fines de lucro con sede en Estados Unidos que se dedica a la transferencia de tecnología y la entrega de licencias.

Los talleres, realizados entre el 29 de marzo y el 3 de abril, fueron dirigidos por dos jóvenes estadounidenses: Katya Hott, diseñadora de videojuegos y desarrolladora de contenido educacional de E-Line Media, y Edward Yoo, productor de videojuegos de Large Animal Games. Durante su semana en Chile, enseñaron a casi 200 estudiantes en colegios de Punta Arenas, Peñalolén y Valparaíso.

Los estudiantes crearon sus propios videojuegos y luego se les pidió que los “vendieran” en un mercado sin piratería y que después repitieran el ejercicio en un mercado con piratería. Al pedírseles que comentaran la experiencia, un estudiante dijo: “Cuando estábamos jugando sin los piratas era divertido, pero cuando aparecieron los piratas nos sentimos muy mal, porque estaban vendiendo lo que yo hice sin permiso”. A través de estos ejercicios, los estudiantes pudieron entender el concepto de propiedad intelectual, además de los negativos efectos económicos y sociales que la piratería puede tener sobre el desarrollo de un país.

Los resultados de los talleres se presentaron en AmCham el 4 de abril. El embajador de Estados Unidos en Chile, Alejandro Wolff; y el presidente de LES Chile, Gonzalo Sánchez, estuvieron entre los asistentes a la presentación. El presidente de AmCham, Javier Irarrázaval, destacó que promover la protección de la propiedad intelectual es una de las preocupaciones clave de AmCham y que la Cámara continúa respaldando iniciativas en esta área. En su presentación, Hott y Yoo enfatizaron la efectividad de los juegos de rol en la comprensión de los estudiantes de conceptos relacionados con la propiedad intelectual.

Dos importantes conclusiones se pudieron sacar de esta iniciativa. La primera, y quizás la más obvia, es que la piratería y la protección deficiente de la propiedad intelectual crea un desincentivo para la creatividad y la innovación. En segundo lugar, que la educación y la concientización de la opinión pública sobre el respeto de los derechos del creador son esenciales.

El embajador Wolff aprovechó la oportunidad para explicar que entre las muchas razones por las que Estados Unidos apoya la protección de la propiedad intelectual está su impacto en la innovación y el desarrollo, así como también los puestos de trabajo que crea.

“Si otros pueden apropiarse de una idea luego de que ha sido probada por alguien más, esto socava la capacidad del creador de recuperar el costo de su inversión. Este problema se enfrenta respetando y aplicando los derechos de propiedad intelectual, lo que también ayuda a asegurar que el sector privado tenga el incentivo para invertir en innovación”, sostuvo el embajador.

En Chile existen dos leyes de propiedad intelectual: la Ley de Propiedad Intelectual, que protege la literatura, las arte y la ciencia, y la Ley de Propiedad Industrial, que protege patentes, marcas comerciales y diseños industriales, entre otros. Pese a los recientes esfuerzos del Gobierno para fortalecer la protección de la propiedad intelectual, la Oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos (USTR, por su sigla en inglés) anunció que Chile sigue en 2012 en la Priority Watch List (lista de observación prioritaria) de países que no han protegido de manera adecuada la propiedad intelectual de empresas estadounidenses

La principal razón por la que Chile aparece en la lista por sexto año consecutivo, desde el punto de vista de Estados Unidos, es que no ha cumplido con sus compromisos en materia de propiedad intelectual correspondientes al tratado de libre comercio suscrito entre ambos países en el 2003. En particular, Estados Unidos insta a Chile a mejorar la protección de las patentes farmacéuticas y a enmendar su régimen de responsabilidad de proveedor de servicio de Internet a fin de permitir una acción efectiva contra la piratería.

Como aprendieron los estudiantes en los talleres de Hott y Yoo, el mundo crece en base a ideas e innovación, pero cuando estas ideas no son protegidas, los creadores no reciben lo que necesitan para seguir produciendo y el incentivo para innovar se reduce.

La innovación es una fuente importante de competitividad y crecimiento económico. Pero en países con débiles leyes de propiedad intelectual, los creadores se enfrentan a tres opciones: desarrollar sus ideas, pero terminar en la quiebra; comenzar por no desarrollar nunca nuevas ideas; o dejar el país e ir a otros con leyes más fuertes.

Si Chile ha de lograr su meta de convertirse en un país desarrollado para fines de esta década, debe mejorar sus leyes con el fin de establecer un marco de propiedad intelectual que fomente una nación más competitiva y moderna.

María Pía Aqueveque es gerente del Departamento de Estudios de AmCham




The development of video games has become an increasingly attractive market for young entrepreneurs, especially due to the growing penetration of smartphone applications around the world. In fact, in Chile there are over 20 companies dedicated to producing video games. But the growth of this industry in Chile, like others based on innovation, depends on better protection for intellectual property.

Educating Chileans about the importance of intellectual property starts at school. For this reason, the US Embassy, in partnership with the Chilean affiliate of the US-based licensing and technology transfer non-profit Licensing Executives Society (LES), recently sponsored video game workshops for students between the ages of 12 and 14.

The workshops, held between March 29 and April 3, were led by two young Americans: Katya Hott, a video game designer and educational content developer at E-Line Media, and Edward Yoo, a video game producer at Large Animal Games. During their week in Chile, they taught almost 200 students at schools in Punta Arenas, Peñalolén, and Valparaíso.

The students created their own video games and were then asked to “sell” them in a market without piracy and then repeat the exercise in a market with piracy. Asked to comment on the experience, one student said: “When we were playing without pirates it was fun, but when the pirates appeared we felt very bad because they were selling what I did without my permission”. Through these exercises, the students were able to understand the concept of intellectual property, as well as the negative economic and social effects that piracy can have on a country’s development.

The results of the workshops were presented at AmCham on April 4. US Ambassador Alejandro Wolff, and LES Chile President Gonzalo Sánchez were amongst those in attendance. AmCham President Javier Irarrázaval highlighted that promoting intellectual property protection is one of AmChams key concerns and that the Chamber continues to support initiatives in this area. In their presentation, Hott and Yoo emphasized the effectiveness of role-playing in the students’ understanding of concepts related to intellectual property.

Two main conclusions could be drawn from this initiative. First, and perhaps the most obvious, is that piracy and poor protection of intellectual property create a disincentive for creativity and innovation. Second, that education and public awareness of respect for creator rights are essential.

Ambassador Wolff took the opportunity to explain that among the many reasons why the United States supports protection for intellectual property is its impact on innovation and development, as well as the jobs it creates.

“If others can take an idea as their own after it has been tried by someone else, they undermine the creator’s ability to recover the cost of his investment. This problem is addressed by respecting and applying intellectual property rights, which also helps to ensure that the private sector has the incentive to invest in innovation,” said the Ambassador.

In Chile there are two intellectual property laws: the Copyright Law, which protects literature, arts and science, and the Industrial Property Law, which protects patents, trademarks and industrial designs, among others. Despite the government’s recent efforts to strengthen protection for industrial property, the Office of the United States Trade Representative (USTR) announced that Chile remains on its 2012 Priority Watch List of countries that have failed to adequately protect the intellectual property of US companies.

The main reason Chile appears on the list for a sixth consecutive year is that, from the United States’ point of view, it has not fulfilled its intellectual property-related commitments in the Free Trade Agreement signed between both countries in 2003. In particular, the United States urges Chile to improve protection for pharmaceutical patents and to amend its Internet service provider liability regime to permit effective action against piracy.

As the students in Hott and Yoo’s workshops learned, the world grows based on ideas and innovation, but when these ideas are not protected, creators do not receive what they need to keep producing and the incentive to innovate is reduced.

Innovation is an important source of competitiveness and economic growth. But in countries with weak intellectual property laws, creators are faced with three choices: develop their ideas but end up bankrupt; never develop new ideas in the first place; or leave and go to other countries with stronger laws.

If Chile is to achieve its goal of becoming a developed country by the end of this decade, it must improve its laws in order to establish an intellectual property framework that fosters a more competitive and modern country.

María Pía Aqueveque is Director of Research & Special Projects at AmCham



Compartir