La Cámara Chilena Norteamericana de Comercio, AmCham Chile, organizó un conversatorio junto a AthenaLab y The Chilean Business Roundtable para analizar el fenómeno del crimen organizado en el país y su creciente impacto en el entorno empresarial. La instancia reunió a representantes del mundo privado, autoridades y expertos en seguridad, quienes coincidieron en la urgencia de implementar una estrategia nacional que ponga freno a la expansión de este fenómeno.
La actividad se enmarca en el Proyecto de Seguridad para Chile, iniciativa impulsada por las tres organizaciones que busca articular una propuesta de largo plazo para enfrentar la crisis de seguridad pública desde un enfoque colaborativo, multisectorial y basado en evidencia.
El conversatorio contó con la participación del ex general director de Carabineros de Chile, Mario Rozas, y del ex prefecto de la Policía de Investigaciones, Pedro Aracena, quien fue también jefe nacional de Seguridad Tecnológica y de las Unidades Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado. Ambos compartieron un diagnóstico sobre la evolución del crimen organizado en Chile y las vulnerabilidades institucionales que hoy dificultan una respuesta efectiva.
En la apertura del evento, Roberta Valenca, presidenta de AmCham Chile, subrayó la importancia de abordar esta problemática desde una perspectiva estratégica. “Los próximos años la prioridad tiene que ser retomar el crecimiento. Estamos convencidos de que la inversión extranjera y la productividad serán las principales herramientas para apalancar ese crecimiento, lo cual será especialmente desafiante en un contexto de gran incertidumbre a nivel global, con un nuevo escenario geopolítico y reordenamiento mundial”, afirmó.
Durante el diálogo, se abordó la necesidad de comprender que la inversión en prevención no debe entenderse como un costo, sino como una ventaja comparativa frente al crimen organizado. Asimismo, se analizó cómo el aumento de la violencia, el uso de nuevas tecnologías por parte de bandas criminales y la expansión territorial del delito están generando un entorno más complejo y demandante para el sector privado.
Entre los temas tratados, se destacó también el impacto del crimen organizado en la competitividad de Chile como destino de inversión, así como los crecientes recursos que las empresas deben destinar para proteger sus operaciones, trabajadores e infraestructura. En ese sentido, se coincidió en que la seguridad es hoy una condición habilitante para el desarrollo económico y la atracción de capitales.
Finalmente, el encuentro permitió visibilizar los avances del Proyecto de Seguridad para Chile, que contempla propuestas orientadas a mejorar la coordinación interinstitucional, el uso de inteligencia estratégica y la articulación de esfuerzos entre el mundo público y privado. El diálogo fue moderado por Pilar Giannini, secretaria ejecutiva de la Asociación de Municipalidades para la Seguridad Ciudadana en la Zona Oriente (AMZO).