Chile-EE.UU.: fortaleciendo lazosChile-EE.UU.: fortaleciendo lazos

25 Marzo 2014

Kathleen Barclays, Presidenta de AmCham


Con satisfacción en la Cámara Chileno Norteamericana de Comercio (AmCham) hemos sido testigos en el primer trimestre de este año de relevantes hitos en la relación entre Chile y Estados Unidos. El Tratado de Libre Comercio entre ambos países cumplió 10 años de vigencia, se dio tramitación legislativa al Acuerdo de Doble Tributación y Chile ingresó al Programa de Exención de Visa (Visa Waiver Program). Esto refleja, por un lado, la profundidad, diversidad y proyección futura de la relación entre Chile y Estados Unidos, y por otro, cómo el trabajo serio, sistemático y -porque no decirlo- creativo ha dado resultado.

Iniciamos el 2014 celebrando una exitosa década de vigencia del Tratado de Libre Comercio entre los dos países, lo que ha hecho posible -entre otros aspectos- que el intercambio comercial entre ambas naciones crezca un 300% en este período.

Luego vimos otro importante paso en este proceso de integración cuando hace poco más de 15 días ingresó al congreso chileno el acuerdo que busca evitar la doble tributación internacional en materia de impuestos a la renta. Por su parte, el Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense realizó su primera audiencia pública para debatir sobre dicho acuerdo. Con estos dos hitos se dio entonces inicio a la tramitación legislativa del mencionado convenio, el que esperamos que una vez en régimen potencie la creación de nuevos negocios y fortalezca el intercambio comercial.

Adicionalmente, el 28 de febrero recién pasado se oficializó el ingreso de Chile al Programa de Exención de Visa, transformándose en la primera nación latinoamericana que participa de este sistema de facilitación del proceso para ingresar a Estados Unidos. De este modo ambas economías quedan integradas no solo por la vía económico-comercial, sino que se inicia también un proceso de integración y facilitación en el movimiento de las personas. No me cabe duda que éste es un paso adicional en la dirección correcta y que se traducirá en beneficios para los ciudadanos de ambos países.

Un beneficio directo de este programa será el incremento en el número de viajes a Estados Unidos, el cual ha sido estimado por la industria del turismo en torno a 25%. Lo anterior, tendrá entre otros aspectos un efecto en áreas como el intercambio cultural y el emprendimiento como parte de un proceso de conocimiento de nuevas ciudades, pensamientos, modelos de negocios y sistemas de vida. Así un viaje puede ampliar horizontes y terminar modificando la mirada de un negocio o ayudar a generar uno nuevo.

Asimismo, es importante destacar que la incorporación de Chile al Programa de Exención de Visa es también un reconocimiento al trabajo y avances que ha tenido el país en cuanto a su institucionalidad y, en particular, a los estándares de seguridad, tecnología y fiscalización.

Considerando las diferencias de tamaño relativo entre ambos países, los avances que Chile está logrando en su relación con Estados Unidos son aún más destacables. Estos logros son producto del trabajo de una sociedad que se ha presentado a dialogar con Estados Unidos como un socio, a su vez ha mostrado creatividad en sus planteamientos y al mismo tiempo siempre ha sido riguroso en la formulación de sus propuestas y en el cumplimiento de sus compromisos, lo cual ha generado las necesarias confianzas que permiten seguir cumpliendo ambiciosas metas.

En AmCham seguiremos trabajando para que los logros construidos entre Chile y Estados Unidos se transformen en oportunidades para los ciudadanos de ambas naciones. Gracias a esta relación construida sobre una base de valores compartidos -democracia, derechos humanos, libre mercado y oportunidades para todos- miramos el futuro con optimismo y abiertos a nuevos desafíos. Esperamos que los pilares de nuestras actividades: energía, innovación, capital humano y sustentabilidad, sean un aporte al desarrollo de los negocios y colaboren en la integración de los dos países.


Fuente: Diario Financiero

Con satisfacción en la Cámara Chileno Norteamericana de Comercio (AmCham) hemos sido testigos en el primer trimestre de este año de relevantes hitos en la relación entre Chile y Estados Unidos. El Tratado de Libre Comercio entre ambos países cumplió 10 años de vigencia, se dio tramitación legislativa al Acuerdo de Doble Tributación y Chile ingresó al Programa de Exención de Visa (Visa Waiver Program). Esto refleja, por un lado, la profundidad, diversidad y proyección futura de la relación entre Chile y Estados Unidos, y por otro, cómo el trabajo serio, sistemático y -porque no decirlo- creativo ha dado resultado.

Iniciamos el 2014 celebrando una exitosa década de vigencia del Tratado de Libre Comercio entre los dos países, lo que ha hecho posible -entre otros aspectos- que el intercambio comercial entre ambas naciones crezca un 300% en este período.

Luego vimos otro importante paso en este proceso de integración cuando hace poco más de 15 días ingresó al congreso chileno el acuerdo que busca evitar la doble tributación internacional en materia de impuestos a la renta. Por su parte, el Comité de Relaciones Exteriores del Senado estadounidense realizó su primera audiencia pública para debatir sobre dicho acuerdo. Con estos dos hitos se dio entonces inicio a la tramitación legislativa del mencionado convenio, el que esperamos que una vez en régimen potencie la creación de nuevos negocios y fortalezca el intercambio comercial.

Adicionalmente, el 28 de febrero recién pasado se oficializó el ingreso de Chile al Programa de Exención de Visa, transformándose en la primera nación latinoamericana que participa de este sistema de facilitación del proceso para ingresar a Estados Unidos. De este modo ambas economías quedan integradas no solo por la vía económico-comercial, sino que se inicia también un proceso de integración y facilitación en el movimiento de las personas. No me cabe duda que éste es un paso adicional en la dirección correcta y que se traducirá en beneficios para los ciudadanos de ambos países.

Un beneficio directo de este programa será el incremento en el número de viajes a Estados Unidos, el cual ha sido estimado por la industria del turismo en torno a 25%. Lo anterior, tendrá entre otros aspectos un efecto en áreas como el intercambio cultural y el emprendimiento como parte de un proceso de conocimiento de nuevas ciudades, pensamientos, modelos de negocios y sistemas de vida. Así un viaje puede ampliar horizontes y terminar modificando la mirada de un negocio o ayudar a generar uno nuevo.

Asimismo, es importante destacar que la incorporación de Chile al Programa de Exención de Visa es también un reconocimiento al trabajo y avances que ha tenido el país en cuanto a su institucionalidad y, en particular, a los estándares de seguridad, tecnología y fiscalización.

Considerando las diferencias de tamaño relativo entre ambos países, los avances que Chile está logrando en su relación con Estados Unidos son aún más destacables. Estos logros son producto del trabajo de una sociedad que se ha presentado a dialogar con Estados Unidos como un socio, a su vez ha mostrado creatividad en sus planteamientos y al mismo tiempo siempre ha sido riguroso en la formulación de sus propuestas y en el cumplimiento de sus compromisos, lo cual ha generado las necesarias confianzas que permiten seguir cumpliendo ambiciosas metas. 

En AmCham seguiremos trabajando para que los logros construidos entre Chile y Estados Unidos se transformen en oportunidades para los ciudadanos de ambas naciones. Gracias a esta relación construida sobre una base de valores compartidos -democracia, derechos humanos, libre mercado y oportunidades para todos- miramos el futuro con optimismo y abiertos a nuevos desafíos. Esperamos que los pilares de nuestras actividades: energía, innovación, capital humano y sustentabilidad, sean un aporte al desarrollo de los negocios y colaboren en la integración de los dos países.

Fuente: Diario Financiero 

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