Con el objetivo de saber cómo aprovechar las ventajas del Tratado de Libre Comercio (TLC) vigente entre Estados Unidos y Chile, conocer los tratamientos tributarios e intercambiar las experiencias de las empresas chilenas que están instaladas en ese país, se llevó a cabo la mesa redonda público - privada denominada “Invertir en los Estados Unidos: Oportunidades y Riesgos”, en la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA).
Este encuentro, organizado por la Cámara Chileno Norteamericana de Comercio (AMCHAM), Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (DIRECON) y la SOFOFA, se centró en analizar los aspectos necesarios para promover y facilitar las inversiones chilenas en Estados Unidos, a través de un diagnóstico de la situación actual y análisis del contexto, oportunidades, experiencias y eventuales riesgos de emprender un proyecto de inversión en el exterior, particularmente en EE. UU.
El vicepresidente de la SOFOFA, Rafael Guilisasti, por su parte, aseguró que su organismo se encuentra participando activamente en el proceso de apertura y diversificación del comercio exterior de Chile, a través del permanente trabajo público – privado para el aprovechamiento de las oportunidades que entregan los acuerdos comerciales que ha firmado Chile. “La solidez del mercado privado de capitales constituye una oportunidad hacer efectiva la globalización de las empresas chilenas en el exterior”.
El Director General de la Dirección DIRECON, Carlos Furche, señaló que en la medida que el proceso de internacionalización de la economía chilena se profundiza, las empresas inversionistas consideran necesario establecerse en los mercados de destino y consolidar sus estrategias de inserción en las distintas economías, por lo que “el fenómeno que está experimentando Chile respecto a la profundización de los acuerdos comerciales en servicios e inversiones, va en la dirección correcta y contribuye a fortalecer la competitividad chilena en términos globales”. Actualmente, las inversiones de Estados Unidos en Chile alcanzan actualmente los US $ 16.600 millones, siendo el principal inversionista extranjero en el país, mientras que las inversiones chilenas en el mercado del norte llegaron a los US$3.600 millones entre 1990 y el primer semestre de 2008.
Además Furche agregó que “la relación comercial de Chile con EEUU se enmarca en el Tratado de Libre Comercio (TLC) vigente desde enero del año 2004, y la evaluación en los tres aspectos principales de un acuerdo comercial –la ampliación y diversificación del comercio, la inversión, su crecimiento y desarrollo, y el óptimo funcionamiento de la institucionalidad establecida en el tratado- nos permite afirmar que nuestra relación comercial bilateral es muy exitosa, dada las inmensas ventajas competitivas y comparativas que poseemos en el mercado estadounidense respecto de los demás actores económicos internacionales”.
El director de AMCHAM, Ricardo García, señaló que la mayor competitividad de la moneda local, más la creciente importancia que las empresas dan a la capacidad de estar establecidos en el mercado de destino de sus exportaciones, como así las ventajas de estar cerca de las canales de distribución y de sus clientes, han hecho cada vez más atractivas las inversiones en Estados Unidos, “por lo que cada vez hay más empresas que se están instalando físicamente en el país, abriendo grandes desafíos en nuestra misión de promover, facilitar y aumentar el comercio y las inversiones entre ambos países”.
El encuentro contó con la participación de ejecutivos de Agrosuper, PriceWaterhouseCoopers, Celulosa Arauco, Viña Montes, Kepler Data Recovery, Laboratorios Harting y Wharton Global Consulting Practicum. Ellos expusieron las ventajas de estar instalados en Estados Unidos, así como los principales problemas a los que se han visto enfrentados. Los temas tributarios, laborales, así como el conocimiento del mercado emergieron como los puntos más relevantes. Junto a ello, los expositores manifestaron que, en general y exceptuando los vinos, la marca “Chile” es desconocida para la gran mayoría de los norteamericanos. Así y todo, empresas tecnológicas y farmacéutica han logrado penetrar con éxito en un mercado exigente y muy competitivo.
Con el objetivo de saber cómo aprovechar las ventajas del Tratado de Libre Comercio (TLC) vigente entre Estados Unidos y Chile, conocer los tratamientos tributarios e intercambiar las experiencias de las empresas chilenas que están instaladas en ese país, se llevó a cabo la mesa redonda público - privada denominada “Invertir en los Estados Unidos: Oportunidades y Riesgos”, en la Sociedad de Fomento Fabril (SOFOFA).
Este encuentro, organizado por la Cámara Chileno Norteamericana de Comercio (AMCHAM), Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (DIRECON) y la SOFOFA, se centró en analizar los aspectos necesarios para promover y facilitar las inversiones chilenas en Estados Unidos, a través de un diagnóstico de la situación actual y análisis del contexto, oportunidades, experiencias y eventuales riesgos de emprender un proyecto de inversión en el exterior, particularmente en EE. UU.
El vicepresidente de la SOFOFA, Rafael Guilisasti, por su parte, aseguró que su organismo se encuentra participando activamente en el proceso de apertura y diversificación del comercio exterior de Chile, a través del permanente trabajo público – privado para el aprovechamiento de las oportunidades que entregan los acuerdos comerciales que ha firmado Chile. “La solidez del mercado privado de capitales constituye una oportunidad hacer efectiva la globalización de las empresas chilenas en el exterior”.
El Director General de la Dirección DIRECON, Carlos Furche, señaló que en la medida que el proceso de internacionalización de la economía chilena se profundiza, las empresas inversionistas consideran necesario establecerse en los mercados de destino y consolidar sus estrategias de inserción en las distintas economías, por lo que “el fenómeno que está experimentando Chile respecto a la profundización de los acuerdos comerciales en servicios e inversiones, va en la dirección correcta y contribuye a fortalecer la competitividad chilena en términos globales”. Actualmente, las inversiones de Estados Unidos en Chile alcanzan actualmente los US $ 16.600 millones, siendo el principal inversionista extranjero en el país, mientras que las inversiones chilenas en el mercado del norte llegaron a los US$3.600 millones entre 1990 y el primer semestre de 2008.
Además Furche agregó que “la relación comercial de Chile con EEUU se enmarca en el Tratado de Libre Comercio (TLC) vigente desde enero del año 2004, y la evaluación en los tres aspectos principales de un acuerdo comercial –la ampliación y diversificación del comercio, la inversión, su crecimiento y desarrollo, y el óptimo funcionamiento de la institucionalidad establecida en el tratado- nos permite afirmar que nuestra relación comercial bilateral es muy exitosa, dada las inmensas ventajas competitivas y comparativas que poseemos en el mercado estadounidense respecto de los demás actores económicos internacionales”.
El director de AMCHAM, Ricardo García, señaló que la mayor competitividad de la moneda local, más la creciente importancia que las empresas dan a la capacidad de estar establecidos en el mercado de destino de sus exportaciones, como así las ventajas de estar cerca de las canales de distribución y de sus clientes, han hecho cada vez más atractivas las inversiones en Estados Unidos, “por lo que cada vez hay más empresas que se están instalando físicamente en el país, abriendo grandes desafíos en nuestra misión de promover, facilitar y aumentar el comercio y las inversiones entre ambos países”.
El encuentro contó con la participación de ejecutivos de Agrosuper, PriceWaterhouseCoopers, Celulosa Arauco, Viña Montes, Kepler Data Recovery, Laboratorios Harting y Wharton Global Consulting Practicum. Ellos expusieron las ventajas de estar instalados en Estados Unidos, así como los principales problemas a los que se han visto enfrentados. Los temas tributarios, laborales, así como el conocimiento del mercado emergieron como los puntos más relevantes. Junto a ello, los expositores manifestaron que, en general y exceptuando los vinos, la marca “Chile” es desconocida para la gran mayoría de los norteamericanos. Así y todo, empresas tecnológicas y farmacéutica han logrado penetrar con éxito en un mercado exigente y muy competitivo.