Este inicio del año 2021 es “más digital que nunca” y, como resultado, un verdadero cambio en los hábitos de los consumidores, reveló el último estudio de Visa, empresa socia de AmCham, sobre las Preferencias de los Consumidores durante COVID-19 en América Latina y el Caribe, realizado hace poco más de un mes en Chile y otros seis países de la región.
Los consumidores ya experimentan “fatiga” a causa de la pandemia y, a pesar de las continuas preocupaciones por la salud, se aventuran a salir más allá de su puerta. Según el 83% de los consultados, su destino preferido para ir de compras es el supermercado, luego las grandes tiendas y después las instituciones financieras.
Así, el gasto de los consumidores se ha incrementado y el 66% de ellos declara haber gastado lo mismo o más en los últimos tres meses, comparado con sólo el 49% registrado en julio del 2020.
“Los consumidores están aprendiendo a navegar en un entorno más dinámico y fragmentado. Salen más y buscan formas más seguras e inteligentes de comprar y pagar”, dijo Vanesa Meyer, vicepresidenta de Innovación para Visa América Latina y el Caribe. “Los cambios en el comportamiento del consumidor provocados por la pandemia, que antes parecían temporales, se están volviendo permanentes y están dando lugar al surgimiento de un nuevo consumidor”.
Según la nueva encuesta, el gasto en tiendas ha aumentado y se prefiere el uso de las tarjetas al dinero en efectivo, ya que el 74% de los consumidores informó que usa tarjetas de débito y el 53% utiliza efectivo.
Cuando se les preguntó sobre sus últimos diez pagos en una tienda, el 48% dijo que ha utilizado formas de pago sin contacto (tarjetas sin contacto, billeteras digitales, accesorios inteligentes) frente al 23% registrado en abril. Las billeteras digitales continúan ganando terreno, con el 20% de los consumidores reportando que las usan en el punto de venta.
La tendencia de los pagos sin contacto confirma los patrones de gasto que Visa ha observado por parte de los tarjetahabientes en América Latina y el Caribe. En noviembre del 2020, la región alcanzó una penetración de las transacciones sin contacto superior al 15%, lo que significa un crecimiento interanual de más del 130% con respecto a la penetración en noviembre del 2019.
El estudio también encontró que el apetito por el comercio electrónico sigue siendo fuerte, con casi la mitad de los consumidores diciendo que compran por Internet una o varias veces al mes y el 71% señalando que planea continuar con la frecuencia actual de compras electrónicas.