La Cámara Chilena Norteamericana de Comercio (AmCham Chile) manifiesta su preocupación por la tramitación legislativa y el próximo proceso de implementación que tendrá en el Sistema de Salud el fallo de la Corte Suprema por tabla de factores en las Isapres.

Creemos fundamental que se cumpla el Estado de Derecho, pero, al mismo tiempo, resulta clave que el Ejecutivo y el Congreso busquen fórmulas que permitan la aplicación de los fallos de la justicia sin comprometer la continuidad de un servicio esencial como lo es el de salud. Se deben cumplir los fallos, pero al mismo tiempo se deben ejecutar todas las soluciones técnicas necesarias que permitan garantizar el acceso, la oportunidad, la eficiencia y la eficacia en las coberturas de los asegurados, y la atención de pacientes, tanto del sector privado como del sector público.

A 9 días del vencimiento de la última prórroga entregada por el máximo tribunal del país, nos preocupa la incertidumbre que hoy experimentan cerca de 3 millones de beneficiarios de las Isapres, cerca de la mitad de ellos con prexistencias y más de 250 mil con tratamientos en curso que requerirán continuidad oportuna en su atención.

También nos preocupa, y estimamos que requiere urgente atención, la posibilidad que una mala solución conlleve a incumplimientos de pago a los prestadores privados, cuyas atenciones son en más de 50% a beneficiarios de Fonasa, junto al insoslayable aumento que implicaría en el gasto fiscal el colapso del sistema privado (asegurador y prestador). Por ello, para reducir los riesgos inminentes para el Sistema de Salud, instamos a la implementación de una solución que se base en medidas técnicas que se han propuesto de manera unánime.

Para la discusión de la Comisión Mixta, creemos relevante que existan consensos entre expertos, buscando viabilizar el sistema, modificando la fórmula hasta ahora aprobada para Ley Corta, para luego avanzar hacia una necesaria reforma integral al Sistema de Salud.

AmCham Chile representa a empresas estadounidenses que invierten en Chile y a compañías chilenas que invierten y exportan a EE. UU. La manera en que se resuelva este desafío enviará señales relevantes a los inversionistas extranjeros del sector Salud y de otros que contribuyen al desarrollo de nuestro país. La inversión estadounidense juega un rol significativo aportando mejoras en prestaciones sanitarias, innovación tecnológica y tratamientos médicos para millones de personas.

Subrayamos la necesidad de una visión a largo plazo, manteniendo rigor técnico y certeza jurídica. Estas acciones fortalecerán la colaboración público-privada en salud, permitiendo superar los retos actuales.

Es imperativo enfocar nuestros esfuerzos en el futuro, asegurando que las coberturas y atenciones de salud de los chilenos y chilenas no se vean comprometidas en el corto, mediano ni largo plazo.